CRÓNICA
Documentos, fotos y las lentejas de Negrín: Gran Canaria recibe 23 cajas 'cargadas de República'
Documentos, libros, fotografías, guías de viajes, cursos de idiomas en vinilo para estudiar la pronunciación, plumas estilográficas y hasta lentejas centenarias llegaron en una remesa de 23 paquetes que pasan a formar parte del fondo documental y bibliográfico que se custodia en la Fundación Juan Negrín en Las Palmas de Gran Canaria desde 2014.
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha sido el encargado de entregar las cajas este miércoles como responsable de la institución depositaria del Archivo Negrín, mientras que su custodia y gestión corresponden a la Fundación Juan Negrín, según los extremos del convenio firmado a tres bandas en 2010 por la corporación insular, la propia fundación y Carmen Negrín Fetter, nieta del científico y político republicano, como responsable del legado. “Estoy muy contenta por el cariño con que reciben los documentos y los objetos que mando”, explica Carmen Negrín, con la ternura de cualquier persona que habla de su abuelo, haya sido o no presidente de una república. “Los libros y documentos que están aquí muestran una lógica, un análisis y todo es fundamentado en base a ciencia”. Y se refiere a su abuelo como “un hombre con unas bases fuertes, una mente fuerte y una voluntad muy fuerte. ”Me parece importante aunque hayan querido borrar su nombre“.
También aludió a esa parte malintencionada del relato histórico sobre la figura de Negrín el presidente de la fundación José Medina Jiménez que manifestó tajantemente que la documentación recibida sigue dando testimonio de que “la mentira, la manipulación y la desinformación pierden una vez más la batalla ante la evidencia de los documentos primarios de la época que aquí guardamos”. Y recuerda que la Fundación atesora la contabilidad del Gobierno de la República desde 1937 hasta 1947.
Por su parte, el presidente del Cabildo, valoró la importancia que cobra el legado de Negrín y su figura a la luz de los cambios geopolíticos que podrían suponer un retroceso para las democracias que se consideraban consolidadas. “Nos enfrentamos a una ola reaccionaria ultraconservadora que quiere impulsar un pensamiento único a través de los medios de comunicación y las redes sociales dominadas por el poder de las autoridades más enriquecidas y con menos discurso y respeto a los valores democráticos”. Morales también señaló la importancia de referentes como la Fundación Juan Negrín y reanudó públicamente su compromiso de colaboración con la institución “y aumentar los recursos que necesite”.
Las “píldoras” del Doctor Negrín
El político canario, preso de su tenacidad, acuñó la frase “resistir es vencer” y para vencer había que comer. En diciembre de 1936 el Gobierno republicano solicitó, y fue aprobado en el Consejo de Naciones Unidas, una misión sanitaria para España. En su informe se destacaban los problemas alimenticios que había sobre todo en la zona republicana. A su vez, a propuesta del Ministerio de Sanidad e Instrucción Pública, en abril de 1937 se activó el Instituto de Higiene de la Alimentación con la finalidad de vigilar la salud de la población a través de una alimentación sana teniendo en cuenta las carencias de la guerra. Entonces se hizo una cartilla de racionamiento en el que se indicaba cómo paliar esas carencias adaptándose a la disponibilidad de alimentos durante todo el año.
Negrín recomendó entonces el consumo de lentejas por sus propiedades para la salud, tanto en el frente como en la retaguardia y es todo un guiño histórico que uno de las 23 cajas recibidas llegaran lentejas centenarias que, otra cosa no, pero resistencia han demostrado.
Medicina, higiene y escuela, tres puntas de lanza de las políticas proyectadas por la II República. Con atención al papel que el Doctor Negrín jugó en la planificación de esas iniciativas y tomando como sede las instalaciones de la Fundación, desde el 3 de febrero al 29 de octubre de 2025 se realizarán una serie de charlas y exposiciones con la intención de dar a conocer toda una filosofía de políticas públicas truncadas por el golpe de estado fascista de Francisco Franco.
La parte más importante del Archivo Negrín está formada por documentos de carácter público -y muchos de ellos inéditos-, emanados de los ministerios de los que fue titular el político canario (Hacienda y Defensa) y de la etapa en la que fue presidente del consejo de ministros.
Tras la derrota, el archivo salió de España por la frontera de Francia, donde sobrevivió a la ocupación nazi. Tras la muerte de Negrín en 1956, los documentos quedaron al cuidado de su familia en París hasta que finalmente fue posible su traslado a Gran Canaria en 2014, y con ello, su regreso a España.
“Aún quedan cosas por traer”, dice entre risas Carmen Negrín, sabedora de que el alivio de la desmemoria es cualquier paquete que contenga testimonio de libertad.
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