'The White Lotus' cierra su temporada 3 en Max resolviendo todas las dudas

Después de ocho episodios en Tailandia, la tercera temporada de The White Lotus ha llegado a su final en Max. Considerada la más polémica de todas las entregas, esta tercera ha concluido su periplo por todo lo alto. Bajo el título de Amor Fati, sus protagonistas y fans se han despedido de la ficción a través de un metraje de unos 90 minutos que ha pasado a considerarse como el más trágico y complejo de la serie creada por Mike White. De esta manera, este último capítulo daba respuesta al interrogante abierto en el primero: ¿a quién pertenece el cadáver que Zion encuentra flotando en el agua y quién tendrá las manos manchadas de sangre?
(Aviso: Esta noticia contiene spoilers)
El final de la tercera temporada fue una masacre que empezó a tomar forma cuando Jim Hollinger volvió al hotel y se encontró con Rick. Este le dijo que su papá no era quién él creía. “Tu padre no era un santo. No te perdiste gran cosa”. Con estas palabras, Jim sella su destino, pues hacen que Rick pierda los estribos y acabe disparándole varias veces hasta acabar con su vida. Con su marido muerto en sus brazos, Sritala revela a Rick que el propio Jim Hollinger era su padre.
Después de matar sin saberlo a su padre, Rick empieza a ser tiroteado por los guardaespaldas de Sritala, que intentan aplacarlo con sus armas. Es entonces cuando Chelsea, la pareja de Rick que segundos antes había aparecido en escena para intentar frenarle, se ve interceptada por una de las balas, muriendo en el acto tras un disparo en el pecho.
Así acaba la temporada 3 de 'The White Lotus' en Max
Se cumplía así una 'profecía' que Chelsea venía dejando caer a lo largo de toda la temporada, asegurando que “las cosas malas vienen de tres en tres”. La noche antes de su muerte, la chica también dejó, sin saberlo, un vaticinio de lo que le estaba por ocurrir: “Si algo malo te pasa a ti, me pasará a mí”. Además, Chelsea explicaba durante la cena a Rick el significado de Amor Fati, expresión que da nombre al episodio: “Que hay que aceptar el destino, bueno o malo. Lo que tenga que ser será”, proclamaba a horas de su fatal destino.
Enseguida, Rick se da cuenta del disparo que ha alcanzado a Chelsea. Completamente devastado y en estado de shock, alza a Chelsea en sus brazos y comienza a caminar en busca de ayuda mientras Sritala insta a Gaitok a que le dispare. Contra todo pronóstico, el guarda de seguridad aprieta el gatillo y mata también a Rick, que cae abatido a uno de los estanques del hotel junto al cadaver de Chelsea.
En la otra cara de la moneda, un personaje vuelve a la vida en los instantes finales del capítulo. Lochlan, que había ingerido por error un batido con semillas venenosas que había preparado su propio padre la noche anterior, recobra el sentido en los brazos del propio Tim, sorteando a la muerte en el último instante. Tras el susto, el padre de familia acaba asumiendo cómo su mujer y sus hijos se enteran que están en la ruina y les pide “superar” esta situación todos juntos.
Por último, Belinda Lindsey, la gerente del spa del hotel de la primera temporada en Hawái que ha regresado en esta tanda de capítulos como trabajadora del nuevo resort, consiguió que Greg le ingresara 5 millones de dólares en su cuenta a cambio de su silencio sobre su paradero en Tailandia tras la muerte de Tanya en la temporada anterior. Acompañada de su hijo, Belinda abandona el país dispuesta a iniciar con el dinero una nueva vida.