David Broncano saca pecho por su tierra y ensalza la figura del olivarero

Ian Gillan, el cantante de la banda de rock Deep Purple y exmiembro de Black Sabbath no olvida el día que pasó por el interrogatorio de David Broncano, por entonces en La Resistencia. Le dio a probar aceite de oliva virgen extra de la tierra del presentador, de Jaén, y le enamoró. Tanto, que esperó a que terminase el programa, pese a que un avión le aguardaba, para preguntar dónde podía comprar veinte litros del bautizado como oro líquido.

La anécdota la ha recordado Broncano este sábado en Andújar, el municipio jiennense donde este fin de semana se celebra la XI Fiesta del Primer Aceite de Jaén con un centenar de AOVE de cosecha temprana. Una cita que ha contado con el cómico y presentador del programa de Televisión Española La Revuelta como pregonero y al chef del programa Cómetelo de Canal Sur Televisión, Enrique Sánchez, como embajador del aceite.

Sin perder ni un ápice de humor, el orcereño ha sacado su lado más reivindicativo para ensalzar la figura del olivarero, reclamando unos precios justos. Y es que retomando la anécdota de Ian Gillan y cómo Bryan Johnson, el multimillonario que busca preservar su juventud eternamente, aconseja su consumo, ha recordado que en Estados Unidos se puede llegar a pagar 50 euros por un aceite de oliva virgen extra. No entiende cómo un producto que puede venderse tan caro, que por su calidad el consumidor está dispuesto a pagarlo, “deje tan pocos beneficios” a quien lo cosecha.

“La agricultura del aceite es la más dura”, ha reconocido, no sin antes confesar que en su vida ha vareado un olivo. Ni siquiera el pequeño de poco más de un metro que ha explicado que tiene en la terraza de su casa. “Es una pelea que debemos tener entre todos, la de reivindicar el trabajo en el campo”.

Defensa de la España rural

Siendo de la Sierra de Segura como es, David Broncano también ha defendido la España rural, la de los pequeños pueblos, la vaciada y la tantas veces olvidada y que no está en los focos mediáticos. “Pagamos tantos impuestos, o más, que los de Madrid o Barcelona y tenemos los mismos derechos”, ha reivindicado entre los aplausos del público.

Y en ese elogio reivindicativo a Jaén no ha dejado pasar por alto su déficit en infraestructuras. “Paco, ahí te la han colao” ha bromeado con el presidente de la Diputación jiennense, Francisco Reyes, en alusión con el aeropuerto Jaén-Granada, que poco o nada tiene que ver con Jaén.

El testigo lo ha tomado, después, el chef Enrique Sánchez, que ha interrumpido un par de veces su intervención por una boda que se estaba celebrando en la iglesia de San Miguel, en la misma Plaza de España de Andújar donde se celebra la Fiesta del Primer Aceite. Al hilo de lo esgrimido por David Broncano, también ha defendido el trabajo del agricultor. “¿Cuántas veces han necesitado ustedes un abogado o un arquitecto? Yo al aceite de oliva lo necesito a diario, así que vamos a darle el reconocimiento que merece”.

Y con el tono más reivindicativo posible, mezclado con el tono de humor de ambos embajadores, es como ha echado a andar la XI edición de la Fiesta del Primer Aceite de Jaén en Andújar, en la campiña, en el corazón olivarero.