La jueza, sobre los venezolanos deportados por Trump: “Los nazis tuvieron mejor trato”

La jueza del Tribunal de Apelaciones de Washington D. C., Patricia Millet, afirmó durante la audiencia de este lunes que los nazis recibieron mejor trato cuando se les aplicó la Ley de Enemigos Extranjeros durante la Segunda Guerra Mundial que los venezolanos deportados a las prisiones de El Salvador. “Los nazis tuvieron mejor trato bajo la Ley de Enemigos Extranjeros que lo que ha pasado aquí”, señaló Millet, quien destacó que las más de 200 personas indocumentadas que fueron puestas en el avión bajo la acusación de ser miembros de la pandilla El Tren de Aragua no tuvieron ningún tipo de proceso judicial.
El 15 de marzo, Trump invocó la Ley de Enemigos Extranjeros para acelerar su plan de deportaciones masivas, que poco después un juez federal de Washington bloqueó. Esta norma de finales del siglo XVIII permite, entre otras cosas, privar de un proceso judicial a las personas a las que se les aplica. Se trata de una legislación creada para tiempos de guerra con el fin de expulsar rápidamente del país a quienes se consideraban colaboradores de naciones enemigas. Antes de Trump, la ley solo había sido utilizada en tres ocasiones. La última fue durante la Segunda Guerra Mundial para detener y expulsar a inmigrantes japoneses, alemanes e italianos.
Mientras el juez ordenó bloquear las deportaciones y aún batalla con la Administración Trump para conocer la hora exacta en que despegó el vuelo de deportación —lo que determinaría si el presidente ignoró la orden judicial—, la Casa Blanca ha presentado un recurso ante el Tribunal de Apelaciones para que se levante el bloqueo judicial impuesto a la aplicación de la Ley de Enemigos Extranjeros.
El Tribunal de Apelaciones de Washington tenía programada para este lunes por la tarde una vista en la que el Gobierno de Trump debía presentar sus argumentos para revocar la restricción impuesta por el juez James Boasberg el 15 de marzo. Dicha resolución prohíbe las deportaciones bajo la Ley de Enemigos Extranjeros que Trump aplicó contra presuntos miembros de la banda venezolana El Tren de Aragua.
Fue durante la audiencia cuando Millet confrontó a los representantes de la Administración Trump. La jueza destacó que incluso los ciudadanos alemanes deportados bajo la acusación de ser nazis tuvieron audiencias judiciales y estuvieron sujetos a regulaciones establecidas, mientras que a los presuntos pandilleros del Tren de Aragua no se les concedieron esos derechos. En los últimos días, muchas familias han descubierto que sus parejas, hermanos o hijos, que llevaban días sin dar señales de vida, habían sido deportados a las prisiones de El Salvador. Pudieron identificarlos gracias a imágenes publicadas en internet. Muchos familiares denuncian que los deportados no tienen ningún vínculo con el Tren de Aragua, más allá de ser venezolanos y tener tatuajes.
Uno de los criterios utilizados para acusar a los venezolanos de pertenecer al Tren de Aragua fue precisamente la presencia de tatuajes, según ha explicado la Casa Blanca. Abogados y familiares denuncian que muchas de las imágenes empleadas para justificar las deportaciones no guardaban relación con el grupo criminal y que, en cualquier caso, la existencia de tatuajes no es un motivo suficiente para acusar a una persona de pertenecer a una pandilla. La Administración Trump aún no ha aportado más detalles o pruebas sobre las acusaciones, mientras los deportados llevan más de una semana encerrados en las prisiones de El Salvador, donde las condiciones de detención vulneran los derechos de los presos.
“No hay regulaciones, y los funcionarios de la agencia que gestionaron este proceso no adoptaron ninguna medida. A estas personas no se les notificó. No se les informó a dónde iban. Se les subió a esos aviones ese sábado sin oportunidad de presentar un hábeas corpus ni ningún otro recurso para impugnar la deportación bajo la Ley de Enemigos Extranjeros”, expuso la jueza Millet.
El asistente adjunto de la Fiscalía General de la Administración Trump, Drew Ensign, rechazó la comparación de Millet. “Rechazamos la analogía con los nazis”, afirmó Ensign, argumentando que algunos de los deportados pudieron presentar peticiones de hábeas corpus.
La vista en el Tribunal de Apelaciones se produce horas antes de la fecha límite que el juez Boasberg dio al Departamento de Justicia para que presentara la información sobre el vuelo de deportación. Después de que la semana pasada la Administración Trump siguiera sin revelar la hora exacta en que despegó el avión, Boasberg concedió una nueva prórroga para que se facilitara dicha información.
Paralelamente, Trump está impulsando una campaña de acoso y derribo contra el juez. La semana pasada pidió al Congreso que iniciara un proceso de impeachment contra el magistrado, una idea que incluso el presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, rechazó. En un gesto inusual, el juez conservador emitió un comunicado recordando que esa no es la solución. A pesar de ello, Trump y su entorno han seguido cuestionando la autoridad de Boasberg como parte de una estrategia para restar poder a los tribunales federales.
Este lunes, Elon Musk compartió en redes sociales una publicación de Trump en Truth Social en la que el expresidente difundía una foto de Boasberg y lo atacaba nuevamente. La semana pasada, Trump ya lo había calificado como un “lunático radical de izquierdas”.
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