Una ruta por Roma a través de las obras de Miguel Ángel

Michelangelo di Lodovico Buonarroti Simoni, conocido como Miguel Ángel, nació el 6 de marzo de 1475 en Florencia, pero pasaría a la historia por dar esplendor a Roma, la actual capital de Italia, y como uno de los mayores exponentes del Renacimiento, así como del artista total, al haber destacado en varias disciplinas como fueron la pintura, la escultura y la arquitectura, con varias obras que son hoy en día icono de la conocida como ‘ciudad eterna’.

La Basílica de San Pedro: ‘La Piedad’

En su veintena, Miguel Ángel ya se coronó en el arte con la escultura conocida como ‘La Piedad’, en la que se representa a la Virgen María con el cuerpo inerte de su hijo, Jesucristo, en brazos, cuyo dramatismo se considera dentro del idealismo renacentista, y que sigue siendo hoy en día siendo una de sus obras más conocidas.

La escultura, que se encuentra en otra obra del artista como es la Basílica de San Pedro del Vaticano, en una de sus capillas, se puede apreciar a través de un vidrio desde que esta sufriera un atentado en 1972, y tiene la curiosidad de ser la única que contiene de forma visible la firma de Buonarroti.

Museos Vaticanos: la Capilla Sixtina

A poca distancia de ‘La Piedad’, también en la Ciudad del Vaticano, se encuentra otra de las obras cumbre de Miguel Ángel, los frescos de la Capilla Sixtina, el lugar donde se da el cónclave para elegir Papa. Unas pinturas que se dieron a principios del siglo XVI, como encargo de por el entonces pontífice Julio II ya como artista consagrado y que fue uno de sus trabajos más complicados, que llegó a afectarle la salud. Esta se puede visitar como parte de los Museos Vaticanos.

Piazza del Campidoglio: en los orígenes de Roma

Pero Miguel Ángel Buonarroti no solo brilló en la pintura y la escultura, sino que también ayudó a vertebrar algunas de las plazas y edificios representativos de Roma. Si bien la Basílica de San Pedro es también obra suya, con su imponente cúpula, otro de sus trabajos más destacados es la famosa Plaza del Campidoglio, donde se encuentran el Ayuntamiento de la ciudad o los Museos Capitolinos.

La plaza fue un encargo de Pablo III por el mal estado en el que se encontraba la colina Capitolina entonces, y de la que también fue el artífice de planificar los diferentes edificios que la conforman. Este enclave de Roma es uno de los más conocidos a nivel turístico, al tener dos iconos como son la estatua de Marco Aurelio a caballo y la loba capitolina, ambas actualmente copias, con sus originales albergadas en museos.

Barrio Monti: El Moisés de Miguel Ángel

Una de las obras exponentes de Miguel Ángel, pero que suelen escapar más a los ojos de los turistas que visitan Roma es la escultura de Moisés, albergada en la iglesia San Pedro ad Víncula, en el barrio de Monti, cercano al Coliseo y el Foro romano. Esta pieza de mármol blanco y de 260 centímetros de altura fue pensada para la tumba del papa Julio II, que, sin embargo, no llegó a su cometido original.