Los supermercados Masymas obligan a trabajar más de 40 horas tres semanas al mes tras una inspección de trabajo

Trabajar más para poder descansar. Ese es el escenario con el que deben lidiar las empleadas de Masymas desde el pasado 30 de diciembre. Durante las primeras tres semanas del mes, tienen que cumplir con un horario de 42 horas, y ya en los siguientes siete días, están obligadas a realizar 35 horas para solamente tener un día libre tras una inspección de trabajo que ha llevado a la empresa a reorganizar los turnos por la “alternancia de mañana y tarde”, según una información publicada por el diario Expansión. Además, puntualizan desde la empresa, que “no se modifica la jornada total, sino que se cambian las horas trabajadas cada semana”, ampliando el horario laboral media hora al día.

Fuentes consultadas de la sección sindical de CCOO manfiestan su disconformidad ante esta medida “impositiva” que no se ha consultado con las propias trabajadoras y explican que la justificación que les ha dado la cadena de supermercados es el “cumplimiento del descanso semanal” porque antes hacían 39,5 horas.

En este sentido, desde la organización consideran que han interpretado la ley a su favor y que suena “paradójico que se deba trabajar más” para poder cumplir con los días de descanso: “Se mantuvieron reuniones con todas las tiendas de la provincia de València durante la primera quincena de diciembre y casi el 95% de las afectadas firmó en contra de este horario”, manifiestan. Asimismo, subrayan que este sistema de descanso ya se había implantado en Alicante y hacen alusión a la reducción de jornada acordada entre el Ministerio de Trabajo y los sindicatos mayoritarios en las 37,5 horas: “No descansamos ni 48 horas que nos toca por ley”.

“Te imposibilita la concilicación y pierdes nivel adquisitivo. Es una imposición. Estamos a la espera de lo que nos diga el juez”. A ello, añaden que cuando trabajan por las tardes no descansan el tiempo mínimo: “Hay sábados que terminamos a las 10 de la noche y empezamos el lunes a las 8 de la mañana. No se han tenido en cuenta los intereses de las propias trabajadoras ni se han puesto sobre la mesa las situaciones de algunas personas con horarios concertados para el cuidado de menores. Todo esto nos perjudica en la organización familiar y en los cuidados”, aseveran. Desde este medio nos hemos puesto en contacto con la marca de supermercados para conocer su versión de los hechos pero no ha habido ningún tipo de respuesta.