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El Reino Unido y Francia trabajan con Ucrania en un plan de paz para presentárselo a Trump

Líderes de gobiernos europeos, la UE, la OTAN y Canadá posan para la foto de familia en la cumbre de Londres este domingo.

María Ramírez

Londres —
2 de marzo de 2025 10:37 h

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El primer ministro británico, Keir Starmer, anunció este domingo que el Reino Unido y Francia están trabajando con Ucrania para presentar un plan de paz a Estados Unidos, que está tratando con Rusia sin contar hasta ahora con los europeos. El plan también incluiría una tregua parcial de un mes mientras se sigue negociando.

Unas horas antes de reunirse con una docena de líderes europeos y jefes de la instituciones de la UE, Starmer explicó en una entrevista a la BBC que está negociando ya con el presidente francés, Emmanuel Macron, y el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para un plan que incluya “garantías de seguridad” en Ucrania, es decir, el despliegue de tropas europeas.

“Para mí, los componentes de una paz duradera son una Ucrania fuerte que pueda seguir combatiendo, negociar un elemento europeo de garantías de seguridad y una barrera de contención de Estados Unidos”, dijo Starmer, que también pidió menos tuits y más acción. “He visto a gente subiendo el tono en Twitter... No estoy interesado en eso, estoy interesado en los pasos prácticos”, comentó.

El primer ministro británico explicó que su país y Francia están más avanzados que los demás en su disposición para participar en una fuerza de paz, pero que también se pueden involucrar ya “posiblemente a uno o dos” países más. La idea es crear una “coalición de voluntarios” más allá de las instituciones de la UE o la OTAN y sin esperar a que “cada país europeo” esté de acuerdo. “Cuantos más, mejor”, dijo.

Macron explicó después en una entrevista a Le Fígaro que el plan incluye una tregua de un mes para ataques por aire y mar y contra infraestructuras energéticas mientras se sigue negociando. La idea no se refiere a los ataques por tierra, según Macron, porque la línea del frente es demasiado amplia. Las tropas europeas se desplegarían después, pero esto no sucederá, según Macron, “en las próximas semanas”.

En la apertura de la cumbre en Londres, Starmer, flanqueado por Macron y Zelenski, insistió en el plan y recordó la gravedad de la situación: “Este es un momento histórico para la seguridad en Europa”, dijo en la mesa donde se sentaban los líderes de los grandes gobiernos europeos, entre ellos el presidente Pedro Sánchez, Canadá, la UE y la OTAN.

El abrazo

Starmer recibió este sábado a Zelenski en Downing Street con una calurosa bienvenida después de la bronca que Donald Trump y su vicepresidente, JD Vance, le echaron al presidente ucraniano en el Despacho Oval este viernes. El primer ministro abrazó a Zelesnki, insistió en su apoyo y en lo “muy, muy bienvenido” que es en el Reino Unido.

Starmer to Zelenskyy: You are very very welcome here in Downing Street. As you heard from the cheers outside, you have full backing across the United Kingdom.

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— Acyn (@acyn.bsky.social) 1 de marzo de 2025, 19:23

Este domingo, en la entrevista en la BBC, Starmer dijo que se había sentido “incómodo” ante la escena en Washington y que “nadie” quiere “ver algo así”, pero evitó criticar a Trump y dijo que su actitud era la de “remangarse” y buscar una solución. Al ser preguntado por la periodista de la BBC si Zelenski había hecho “algo mal”, Starmer contestó contundente: “No. Éste es un hombre cuyo país ha estado en guerra durante tres años. Han sido invadidos por Rusia. Ésta es una agresión rusa”.

El viernes, después de la crisis ante las cámaras, Starmer habló por teléfono con Zelenski y con Trump, y este sábado, después de la reunión con el presidente ucraniano, volvió a llamar al de Estados Unidos. La intención de Starmer sigue siendo “tender un puente” con Estados Unidos para participe de alguna forma en las “garantías de seguridad” para Ucrania en un “momento de gran fragilidad para Europa”.

Los europeos afrontan un desafío único en décadas ante el giro de su principal socio y aliado hasta ahora. De hecho, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, presumió este domingo de su sintonía con Estados Unidos: “La nueva Administración está cambiando rápidamente sus configuraciones de política exterior. Esto coincide en gran medida con nuestra visión”, dijo.

Starmer dijo enfáticamente que no confía en el presidente ruso, Vladímir Putin, pero sí lo hace en Trump y en su deseo de “una paz duradera”. Para ello, insistió en que si hay un alto el fuego o un acuerdo de paz “hay que defenderlo” porque el “peor de todos los resultados es que haya una pausa temporal y después Putin vuelva otra vez”. “Esto ha sucedido en el pasado”, recordó en referencia a los acuerdos tras la anexión rusa de Crimea y las incursiones en el Donbás en 2014, después de que las protestas populares consiguieran que Ucrania mantuviera la firma del acuerdo de asociación con la Unión Europea.

La mayoría de los gobiernos europeos se reunían esta tarde en la cumbre convocada por Starmer en Londres con Zelenski y los jefes de Estado y de Gobierno de España, Francia, Alemania, Italia, Polonia, Finlandia, Suecia, Noruega, Países Bajos, República Checa, Rumanía y Canadá. También asisten el ministro de Exteriores de Turquía, la presidenta de la Comisión Europea, el presidente del Consejo Europeo y el secretario general de la OTAN.

Antes de la cumbre, Starmer, además, ha tenido una reunión solo con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, cercana a Trump y una de las líderes más frías en su apoyo a Ucrania el viernes. A su llegada a Downing Street, Meloni comentó la prioridad es “evitar el riesgo de que Occidente se divida” y que su país también puede hacer de “puente” con Trump. La primera ministra italiana también ha hablado por teléfono con el presidente de Estados Unidos después de la bronca a Zelenski en Washington, y se ha quejado esta semana de que Macron visitara la Casa Blanca como, según ella, supuesto portavoz de Europa.

Starmer también ha charlado de manera telemática con los líderes de las repúblicas bálticas, las más vulnerables a un ataque ruso y que también podrían participar en una coalición de apoyo a Ucrania.

Donald Tusk, el primer ministro de Polonia, pidió este domingo un refuerzo de seguridad para Estonia, Lituania y Letonia, y también para su país y para Finlandia, el flanco oriental más expuesto a la amenaza rusa.

Según Tusk, los europeos deben mantener la alianza con Estados Unidos aunque la posición de la Administración Trump “no sea tan clara” con respecto a la invasión rusa de Ucrania como la de la mayoría de los aliados europeos. Pero, en última instancia, se trata de que los europeos se encarguen de su propia seguridad: “Es una paradoja, como alguien ha señalado con razón, que 500 millones de europeos pidan a 300 millones de estadounidenses defenderlos de 140 millones de rusos”, dijo.

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