Detenido un hombre por matar en Murcia a una niña de cinco años, hija de su expareja

La Guardia Civil ha detenido en Torrevieja (Alicante) a un hombre como presunto autor de la muerte de una niña de cinco años en Murcia como consecuencia, según los primeros indicios, de la ingesta de pastillas.  El hombre de 47 años aprovechó un trayecto en su coche con la pequeña, hija de su expareja, para suministrarle estas pastillas o sustancias estupefacientes. Una vez se realice la autopsia en las próximas horas, se determinará el tipo y la cantidad de pastillas ingeridas por la menor.

El diario La Opinión de Murcia, con fuentes cercanas al caso, informa de que el exnovio de la madre de la pequeña estaba siendo buscado como responsable de los hechos. Las fuerzas de seguridad no descartan que se trate de un caso de violencia vicaria. Ramona era la madre adoptiva de la pequeña, Nadia, hija biológica de su prima Isabel. Ambas se encontraban esta mañana en la puerta del Ayuntamiento de Murcia en el minuto de silencio convocado por el Consistorio de la capital murciana. La Delegación de Gobierno también ha convocado otro en la puerta de esta institución.

“Me amenazaba, pero yo no hacía caso”, ha dicho Ramona frente al Ayuntamiento murciano. La madre adoptiva había roto la relación con el presunto asesino el pasado mes de agosto tras nueve años juntos. “Me insultaba, tomaba drogas cuando estaba de bajón, me ha pegado un par de veces”, ha abundado. “Muchas veces se llevaba a la niña y la trataba de forma ejemplar; se desvivían los dos juntos. No sé cómo ha pasado esto, lo ha hecho para hacerme daño a mí porque no aceptaba que no iba a estar con él”.

“La niña ya está en el cielo”

“Me mandó un mensaje. Lo tenía todo preparado y lo ha cumplido”, ha explicado Ramona. Una familiar suya ha apuntado que el sospechoso del crimen tenía “obsesión” con ella. Fue el presunto autor quien llamó a la madre adoptiva a media tarde de este martes para decirle: “La niña ya está en cielo”. Inmediatamente después, la madre llamó a los padres del detenido que localizaron el cuerpo de la menor en el domicilio de Llano de Brujas, han detallado a EFE las mismas fuentes.

El sospechoso del crimen de la menor se llevaba a la niña algunas tardes “al parque o a las bolas”. El domingo pasado no había podido hacerlo porque tenía trabajo, según el testimonio de la madre adoptiva y, por eso, le pidió recogerla el martes del colegio. “Tenía mucha prisa y se la llevó a comer. Ya a las cinco de la tarde me llamó para decirme que estaba en el cielo y para reírse de mí”. “Cuando se la llevó, lo vi normal”, ha dicho Ramona entre lágrimas.

“Estaba premeditado, lo tenía todo en mente. No tiene perdón del Señor ni de nadie porque yo he tenido familia drogadicta y no les ha dado por matar a nadie. A su hija verdadera mira cómo no se ha arrimado. No hay palabras. Es un maltratador y la acosaba y me acosaba a mí por teléfono también”, ha explicado, entre gritos, una prima de Ramona.

La madre adoptiva no había denunciado al presunto asesino de Nadia y tampoco figuraba en el Sistema de Seguimiento Integral de en los casos de Violencia de Género (VioGén).

Detenido en Torrevieja

Sobre las 22:00 horas de este martes, el hombre fue detenido en Torrevieja (Alicante) tras avisar él mismo a la Guardia Civil de que se encontraba cerca del cuartel de la localidad alicantina.

Según ha informado el instituto armado, los hechos han ocurrido en la tarde de este martes en un domicilio de la pedanía murciana de Llano de Brujas cuando han encontrado muerta a la menor.

Las fuentes han precisado que, tras tener conocimiento de que el presunto autor de los hechos pudiera estar en Torrevieja (Alicante), se ha coordinado con la Guardia Civil de esa localidad y se ha detenido al presunto autor del homicidio.

Fuentes de la investigación han indicado a EFE que entre el detenido y su expareja, de 50 años, madre de la niña, no existen antecedentes por violencia machista.

Aunque ambos no mantenían ya relación sentimental, según las fuentes consultadas, era habitual que el arrestado, de nombre Jesús, recogiera a la pequeña en la pedanía murciana de Patiño para pasar las tardes en la casa familiar de él situada en Llano de Brujas, a diez kilómetros.