El PP y Vox quieren devolver las vaquillas a Jaca 16 años después

El Ayuntamiento de Jaca quiere recuperar las vaquillas para sus fiestas patronales. La localidad altoraragonesa no celebra este tipo de actividades desde 2009, y el equipo de gobierno encabezado por el PP con el apoyo de Vox y la plataforma ciudadana Aragoneses apuesta por este espectáculo taurino con la instalación de una plaza portátil. La voluntad del consistorio ha levantado un intenso debate entre quienes ven en esta medida una oportunidad para revitalizar las fiestas y satisfacer una demanda social, especialmente entre los jóvenes; y quienes, como Chunta Aragonesista (CHA), se oponen tajantemente y argumentan que estos festejos promueven el maltrato animal y no deberían tener cabida en el siglo XXI.

El último pleno del ayuntamiento rechazó la propuesta de CHA para declarar Jaca “ciudad contra el maltrato animal” y evitar así la suelta de vaquillas en las fiestas de Santa Orosia, que se celebran durante el mes de junio. Una opción en la que el consistorio está trabajando. CHA solicitó la realización una consulta pública para conocer la opinión de los jacetanos.

La mayoría de los concejales votó en contra: los del equipo de gobierno y el PAR. El portavoz del PP, Daniel Ventura, defiende los festejos con vaquillas “como una actividad festiva y cultural que no implica un mayor sufrimiento del que asumen los animales en otras actividades ampliamente aceptadas por nuestra sociedad”. Desde el Partido Popular se indica que “el ayuntamiento no plantea rejones o novilladas”.

La propuesta de CHA sí contó con el apoyo de +Jaca y el PSOE, que ve con buenos ojos abrir un proceso participativo a la ciudadanía en una ciudad sin tradición de celebración de este tipo de eventos. “Hablamos de ética y empatía, de no ser crueles con seres vivos que sufren y no disfrutemos del dolor ajeno”, señala el portavoz de CHA en el Ayuntamiento de Jaca, José María Martínez. Pide que no se financien “espectáculos crueles” en un municipio “sin tradición taurina”. Desde el PSOE, Manuel Díaz apunta que “llevamos 20 años sin vaquillas en Jaca y no hay que tener miedo a abrir un proceso de participación como el que se dio con la situación de la estación de autobuses”.

Las vaquillas desaparecieron del programa festivo de Jaca en 2009 debido a su elevado coste -unos 9.000 euros por sesión en aquel entonces- y a una respuesta ciudadana que no justificaba la inversión. En los últimos años, el equipo de gobierno ha percibido “un creciente interés, especialmente entre las generaciones más jóvenes, por recuperar este tipo de eventos como parte de la identidad festiva de la ciudad”. Para hacerlo realidad, se planea instalar una plaza de toros portátil, “una solución práctica que cumple con los requisitos de seguridad y accesibilidad establecidos por la normativa aragonesa”.

El anuncio se produce tras un intento fallido en 2024, cuando los plazos de contratación impidieron su puesta en marcha. En esta ocasión, el consistorio ha trabajado “con antelación para garantizar que las vaquillas formen parte de las fiestas de junio”, apuntan frente a la propuesta de CHA de declarar a Jaca “ciudad contra el maltrato animal” y realizar una consulta ciudadana para conocer la opinión de los vecinos. El equipo de gobierno argumenta que su recuperación responde a una demanda real y busca revitalizar unas fiestas que, en los últimos años, “han perdido parte de su esencia tradicional”.

En Aragón, los festejos taurinos populares -que incluyen encierros, sueltas de vaquillas, toros embolados y ensogados- continúan siendo una práctica extendida, especialmente en las provincias de Zaragoza y Teruel, mientras que Huesca cuentan con una menor presencia. En 2024, Aragón registró un total de 2.722, una cifra similar a la de 2023 (2.744). Tras la caída a causa de la pandemia, la cifra se ha ido recuperando hasta retomar valores similares a los anteriores a 2020. En 2019 se realizaron 2.200 festejos por los 45 de 2020, 161 de 2021 y 317 de 2022. Huesca (30), notablemente por debajo de Teruel (417) en esta correlación en 2019.

En términos económicos, los festejos taurinos representan una inversión significativa para los ayuntamientos. El coste medio de una sesión de vaquillas en Aragón puede irse por encima de los 1.200 euros, una cantidad a la que se han de añadir gastos adicionales como seguros, servicios médicos, ambulancia y veterinarios. Unos 2.000 euros. Para una plaza portátil de 2.000 localidades, el alquiler asciende a unos 6.500 euros, lo que eleva el coste total de un  festejo a cerca de 9.000 euros, similar a lo presupuestado en Jaca en 2009 ajustado a la inflación.

En cuanto a la asistencia, las sueltas de vaquillas en plazas como la de Zaragoza atraen a unas 15.000 personas por sesión durante las Fiestas del Pilar, con entradas a 6,5 euros de media. En Huesca capital, durante las fiestas de San Lorenzo, las vaquillas matinales de 2024 congregaron a unas 2.000 personas diarias, según estimaciones de Tauroemoción, la empresa organizadora. Estos números sugieren que, pese a la controversia, los festejos taurinos mantienen un público fiel.

La celebración de festejos taurinos en Aragón está regulada por el decreto 226/2001, que establece requisitos estrictos de seguridad como la presencia de ambulancias, veterinarios y medidas de protección en los recintos. En el caso de Jaca, la plaza portátil debería cumplir con estas normas, incluyendo barreras de altura adecuada, salidas de emergencia y corrales para las reses. Además, la normativa prohíbe la participación de menores de 16 años, personas bajo los efectos del alcohol o con discapacidades que comprometan su seguridad, aunque en la práctica estas restricciones son difíciles de controlar en eventos masivos.