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CRÓNICA
La eterna rotonda del destino devuelve a Sánchez a la cuna del sanchismo para honrar a Toscano, su padrino político

El presidente Pedro Sánchez y el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Rodríguez, entregan la medalla de la ciudad al exregidor, Francisco Toscano

Daniel Cela

Dos Hermanas (Sevilla) —
17 de marzo de 2025 16:48 h

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Dice Manu Sánchez, insigne nazareno, que no entiende cómo los americanos hicieron la Ruta 66 para cruzar los Estados Unidos de punta a punta sin una sola rotonda. “Si te equivocas, tienes que llegar al final para dar la vuelta”. Dos Hermanas tiene más de 70 rotondas y, si uno no está atento, puede entrar y no saber (o no querer salir) del municipio sevillano.

Es lo que debió ocurrirle a Francisco Toscano, alcalde durante 39 años –diez mayorías absolutas–, pero también a Pedro Sánchez, que siempre termina volviendo al lugar en el que fue feliz en medio de una época de mucha infelicidad. La eterna rotonda de lo mismo ha devuelto a estos dos políticos a Dos Hermanas, cuna del sanchismo, que este lunes lluvioso ha rendido homenaje a su alcalde más veterano, el hombre que diseñó en su cabeza el mayor municipio en expansión de Andalucía, nombrado hoy hijo predilecto e hijo adoptivo con el voto unánime de toda la corporación municipal.

Sánchez, como invitado de honor, ha vuelto al punto geográfico exacto donde nació el sanchismo para arropar a su padrino político. “No es ningún secreto que yo hoy no estaría aquí si no hubiera tenido tu respaldo incondicional. Me apoyaste cuando más falta me hizo, gracias, siempre he encontrado en ti la vitalidad del más joven de los militantes, la calma de los más veteranos, ya un amigo siempre”, ha subrayado el presidente ante su anfitrión.

Han pasado algo más de ocho años desde que Toscano organizó el acto en el que Pedro Sánchez anunció su candidatura a las primarias del PSOE para recuperar la secretaría general, de la que había sido expulsado meses antes por sus propios lugartenientes. El expresidente estuvo callado meses, tras su dimisión como líder socialista, tras perder dos elecciones generales, tras negarse a abstenerse en la investidura de Mariano Rajoy –“no es no”– y confirmó su regreso a la primera línea política empujado por Toscano y unas 2.000 personas que desbordaron el entorno del Parque Tecnológico de Dos Hermanas.

Ganó las primarias a Susana Díaz, ganó una moción de censura a Rajoy y encadenó siete años de gobiernos en minoría, zarandeado por una tormenta tras otra, pero quizá ninguna como aquella de octubre de 2016 que le arrebató todo y le hizo llegar sin nada a Dos Hermanas, aquel 28 de enero de 2017. Muchos de los que le acompañaron entonces estaban hoy aquí, incluido el actual alcalde, Francisco Rodríguez, que llevaba semanas esperando que Moncloa despejara un día en la agenda del presidente para venir al homenaje de Toscano.

El mayor bastión que le queda al PSOE

Quico Toscano ganó sus primeras elecciones el 23 de mayo de 1983. “Es un día grandioso para mí”, ha admitido el exalcalde, que subió al atril tras secarse las lágrimas que le provocaron el discurso de su hija María Isabel. Al minuto de su homenaje él mismo lo convirtió en un homenaje al presidente. “Hace ocho años, cuando anunciaste tu candidatura ahí al lado, en el Lago de la Vida, los que te empujamos no éramos conscientes de las vicisitudes que te esperaban. Superaste tus dudas de entonces y hoy eres un referente en España y en Europa”, ha subrayado.

Dos Hermanas es la novena ciudad más grande de Andalucía y el mayor bastión que le queda al PSOE tras perder todas las capitales (hace poco ha recuperado Jaén). Es un municipio, pegado a Sevilla, que crece a un ritmo superior a la media, hay 5.500 viviendas de protección proyectadas en la zona de expansión, la mitad de las que se están construyendo ahora en Andalucía. Rodríguez ha glosado los “éxitos” de su predecesor, a quien ha tildado de “padre” y “referente en la política y en la vida”. Pero Toscano también tiene en su haber –y así lo ha subrayado con cierto orgullo– la resurrección política de Pedro Sánchez.

“Los medios decían que había un diputado con madera en el Congreso. Le dije a Paco, que era mi secretario de Organización, que te invitara a Dos Hermanas para conocerte. Estuviste en nuestra agrupación, tomamos unas tapas y unas copas, tenías apenas 40 años y me sorprendiste. Me dijiste que querías dirigir el partido para ponerlo al servicio de España”, ha recordado el exregidor.

“Es la primera vez en 40 años que veo llorar al alcalde”, decía una de sus colaboradoras. Toscano se ha emocionado varias veces al recordar sus vivencias como alcalde en las últimas cuatro décadas. “Mi vida está muy vinculada a este pueblo, fui el primero de la familia que llegué, pero hoy viven aquí muchos de mis 14 hermanos, hijos, sobrinos...”. El exalcalde no ha querido que le cuelguen la medalla de la ciudad, que ha recogido de manos del presidente, porque dice sentirse “depositario” de la corporación municipal, de sus antiguos compañeros, de sus vecinos...

El barrio nuevo de Dos Hermanas donde se ha celebrado el acto está lleno de urbanizaciones recién inauguradas, a medio construir o recién empezadas. Hay solares vacíos alrededor, supermercados en mitad de la nada, una universidad privada al lado –la Loyola– y grandes avenidas con nombres de políticos ilustres, como Felipe González, Rafael Escuredo, Manuel Clavero Arévalo, Manuel Fraga, Plácido Fernández Viagas, Santiago Carrillo...

La plana mayor socialista

A Toscano le ha acompañado la plana mayor del PSOE. También, en primera fila, la vicepresidenta del Gobierno, ministra de Hacienda y líder de la federación andaluza, María Jesús Montero, su predecesor y portavoz socialista en el Senado, Juan Espadas, el vicepresidente del Congreso y sanchista de primera hornada, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis...

Sánchez ha cerrado el acto con un discurso pausado, que ha recorrido toda la trayectoria de Toscano, desde que ejerció como abogado laboral hasta sus 40 años como alcalde. Cuando tomó el bastón de mando, en Dos Hermanas se pagaba en los bares con pesetas. Había 60.000 habitantes y hoy son más de 140.000. Había 750 calles y hoy son 1.400. “La gente ha querido venir a vivir aquí por sus servicios públicos, porque hay trabajo y vivienda, por los valores del socialismo democrático”, ha dicho el mandatario.

El presidente del Gobierno se ha referido a Toscano como “el socialista que nunca le tuvo miedo al cambio”. Y ha revelado que tuvo “oportunidades de saltar a la política autonómica y nacional, pero decidiste que tu sitio está entre los vecinos y vecinas nazarenos”. Toscano fue alcalde desde la Transición al siglo XXI, cuando España entró en la Unión Europea, cuando Sevilla acogió la Exposición Universal, cuando España ganó el Mundial de fútbol de Sudáfrica y cuando el mundo fue asolado por la pandemia de coronavirus.

“Ya me dirás cómo se logran las mayorías absolutas”, ha bromeado Sánchez, un presidente siempre haciendo equilibrios sobre el vértice de una aritmética endiablada en el Congreso. “Te han votado personas que ni siquiera comparten tu ideología. Has sido un líder atípico, porque tus políticas no han sido tus palabras, sino los hechos. Has sido un ser extraño en la política de este siglo, un político de gestión, una buena persona”, ha concluido el presidente.

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