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Maduro llama “nazi” a Ayuso por la cancelación del ciclo de cine venezolano en Casa de América

El líder chavista Nicolás Maduro, durante un acto celebrado el 10 de enero de 2025 en Caracas.

Somos Madrid / Europa Press

18 de marzo de 2025 12:28 h

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Nicolás Maduro ha afirmado que la cancelación de un ciclo de cine venezolano en Casa de América evidencia que “en España se impuso el fascismo”. No en vano, el dirigente venezolano tacha de “fascistas” al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y a la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso. En el caso de la dirigente autonómica, añade además el calificativo de “nazi”.

“Le tienen miedo a la verdad en Venezuela. ¿Por qué será?”, se ha preguntado durante su programa en la televisión estatal del país suramericano. Estas palabras llegan después de que Casa de América (un consorcio participado por el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, así como el Ministerio de Asuntos Exteriores) anulase un ciclo de cine que iba a comenzar el lunes.

La decisión se produjo después de que el consejero de Cultura de la Comunidad de Madrid, Mariano de Paco, y la vicealcaldesa de la capital, Inmaculada Sanz, dirigiesen sendas cartas al director general de Casa de América, León de la Torre. En ellas solicitaban expresamente la no proyección de tres largometrajes. Sanz incluso deslizaba al final de su escrito que, en aras de que “Casa de América no se convierta en un altavoz del autoritarismo”, el Consistorio “trasladará y defenderá esta protesta en los órganos de gobierno de la institución, para que se adopten las decisiones necesarias al respecto”. Casa de América es una entidad asentada en el Palacio de Linares, a escasos metros del Palacio de Cibeles (sede del Ejecutivo municipal).

En busca de sedes alternativas para las proyecciones

Maduro aboga ahora por impulsar la difusión de las películas a través de plataformas de streaming y por redes sociales: “De Venezuela con amor para España”. También la embajada de Venezuela, que organizó el ciclo para Casa de América, ha anunciado que lo celebrará en una nueva localización “aún por definir”.

El mandatario defiende que las películas vetadas aluden a la resistencia venezolana frente a supuestas conspiraciones internacionales, si bien tanto la Comunidad de Madrid como el Ayuntamiento de la capital habían criticado las proyecciones dentro del ciclo Cine y memoria: La voz del Pueblo y la lucha por la soberanía por considerar que enaltecían discursos chavistas. Para Almeida, “era un mensaje equívoco el que se transmitía desde Casa América dando cabida al régimen chavista y, por tanto, ofendiendo gravemente a todos aquellos que desde Venezuela, desde dentro pero también desde fuera y singularmente en Madrid, están luchando todos los días por acabar con la tiranía”.

Las piezas de la polémica son tres. La primera es el drama romántico Operación Orión, una historia “basada en hechos reales sobre la invasión paramilitar frustrada e intento de magnicidio contra el presidente Hugo Chávez en Venezuela en el año 2004”, según informó la propia Casa de América. La segunda el documental La batalla de los puentes, que aborda “cómo el pueblo venezolano y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana resistieron al intento de fuerzas opositoras de ingresar por la fuerza al país el 23 de febrero de 2019”. Por último, Alí Primera narra los eventos históricos que llevaron a conocer a este cantauror como “cantor del pueblo” y líder del “mayor movimiento de artistas venezolanos comprometidos con la causa de los desposeídos”.

Antes de que Maduro se pronunciase, su ministro de Cultura tachó ya la cancelación de “censura”. Ernesto Villegas declaró el pasado domingo que “la suspensión de las proyecciones obedeció a presiones de Isabel Díaz Ayuso, jefa del Gobierno madrileño, fanática de Francisco Franco y José María Aznar, en connivencia con actores de la derecha fascista venezolana enquistada en la capital española”. Opina también que “el tiro, sin embargo, les salió por la culata: apenas enterados de la insólita decisión, numerosos sindicatos, casas de estudios y otras instancias de la sociedad civil española se han comunicado con nuestra embajada para organizar proyecciones alternativas”.

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